La firme demanda de alimentos desde China y otros países del sudeste asiático hará que los precios de la soja vuelvan a un punto de equilibrio, según destacó Martín Mendoza, gerente comercial de Louis Dreyfus Commodities.
En momentos en que los productores afinan los números para tomar decisiones hacia la siembra de la próxima zafra, la empresa Louis Dreyfus Commodities (LDC) realiza una serie de cinco conferencias en diferentes departamentos para exponer sobre las perspectivas comerciales y los servicios que ofrece la empresa. La primera de estas jornadas se cumplió en Treinta y Tres, en una zona donde la soja ha crecido mucho, sobre todo el último año.
Los precios de la oleaginosa no son lo que eran y no lo serán en la próxima zafra, a raíz de la recomposición del stock mundial, una vez superados los efectos del clima sobre las cosechas del año pasado.
Sin embargo, se esperan matices a los que habrá que estar atentos para poder aprovechar, sobre todo cuando se registren picos "altos", ya que el mercado reacciona instantáneamente a la mínima señal.
Un ejemplo de ello fue lo ocurrido el lunes en el mercado de Chicago cuando se difundió una previsión climática de tiempo seco en Estados Unidos que movió hacia arriba los precios unos cuantos dólares.
Martín Mendoza, gerente comercial de LDC Uruguay consideró que "a los productores les fue muy bien en los últimos años, pero están muy nerviosos con la rentabilidad con una soja a US$ 430 por tonelada". Mendoza entiende que es un precio coyuntural, que se va a superar en el mediano plazo, básicamente por el riesgo que supone una reducción significativa en la oferta, sobre todo de la oleaginosa producida en Brasil y Argentina.
El ejecutivo estimó que las perspectivas de este grano, mirando al futuro, "si bien no se llegarán a precios de US$ 500 por tonelada, son a mediano plazo alcistas. Esta campaña creo que ya está lanzada, todo el mundo ya tiene sus rentas negociadas y gran parte de los insumos. Para adelante creo que no puede bajar demasiado más la soja, porque directamente se va a ver mermada no sólo la producción, sino la siembra en Uruguay, Brasil y Argentina".
Mendoza también señaló que "China sigue demandante de alimentos y todo el sudeste asiático también, por lo tanto, el precio va a volver a un punto de equilibrio. Si la soja baja demasiado, la propia demanda la va a traccionar hacia arriba".
El gerente comercial de LDC le dijo a los productores que primero hay que pasar esta campaña, en la que los precios de la soja no son los mismos que la del año pasado.
Tener bien aceitada la logística es una de las claves del éxito. En este sentido Uruguay afrontó problemas por la saturación de la capacidad portuaria, que ocasionó demoras promedio de 30 días para embarcar, asumiendo un costo del orden de US$ 8 la tonelada, que impactan distinto con una soja por debajo de los US$ 450 por tonelada que cuando se pagaba a US$ 500 por tonelada.
También se planteó entre los concurrentes a la conferencia la preocupación por el costo de los fletes, una variable de cuya negociación no participan los productores y que en definitiva son quienes terminan asumiendo el costo.
Luego de esta primera conferencia ofrecida en Treinta y Tres, las restantes programadas por LDC serán en Paysandú, Young (Río Negro), Durazno y Nueva Palmira o Mercedes.
"El objetivo es compartir información de semillas, fertilizantes, mercado y darles herramientas a los productores para que puedan tomar mejores decisiones al momento de plantar", señaló Martín Mendoza, el gerente comercial de LDC.